15 de abril de 2020 126
Nunca antes la sociedad había tenido que lidiar con una situación semejante a la crisis sanitaria provocada por el Covid-19. Se nos han impuesto por ley limitaciones de movilidad, confinamiento, tenemos miedos y estamos preocupados por nuestro futuro. No tenemos claro cómo será nuestra situación cuando podamos recuperar la vida que hemos dejado atrás.
Cómo ha cambiado la crisis del Covid-19 nuestra forma de relacionarnos
La crisis del Covid-19 y su consiguiente distanciamiento social nos ha obligado a adaptarnos a otras formas de trabajar y relacionarnos y las nuevas tecnologías nos están haciendo, una vez más, la vida más fácil. En esta ocasión nos permiten estar más cerca de nuestros familiares y amigos y seguir relacionándonos profesionalmente. Las herramientas de videollamadas como Skype, Zoom, WhatsApp, Hangouts, etc. resultan ser las más útiles para organizar reuniones de equipos, con clientes y proveedores. Es ahora cuando nos estamos dando cuenta de que quizá la necesidad de presencia física para cerrar reuniones o contratos importantes no lo era tanto. Cada día estamos tomando decisiones igual o más importantes que antes, y lo hacemos a distancia.
Me dedico a la actividad comercial desde hace unos cuantos años y siempre se ha valorado el relacional, las reuniones presenciales para negociar y tomar decisiones. En algunos casos he llegado a recorrer cientos de kilómetros para breves encuentros para tener un encaje de manos o un abrazo. Estas costumbres muy probablemente costará que las volvamos a recuperar, al menos a corto plazo.
Esta crisis sanitaria vaticina una crisis social y económica que tendremos que gestionar cuando acabe la primera fase de confinamiento. Probablemente esta experiencia también nos deje una herencia positiva, pues estamos aprendiendo a gestionar nuestra rutina de una forma más sostenible y práctica.
El papel de las ETT de España en esta crisis
El nuevo escenario de recuperación nos obligará a retomar parte de nuestras necesidades de personal en las empresas. Para ello, de la misma manera que ocurrió en la última crisis económica de 2008, las Empresas de Trabajo Temporal (ETT) tendrán un papel fundamental en esta remontada. Abastecen a las empresas del personal que necesitan en cada momento para la consecución de sus objetivos de negocio y convierten sus costes fijos en variables, una ventaja dentro de un mercado tan cambiante. Trabajo por proyecto productivo, paquete en mano, con control en todo momento del coste y flexibilidad 24/7 para adaptar tu operativa.
Durante estas semanas de confinamiento los servicios temporales también son clave para mantener las actividades esenciales. Por ejemplo, el sector cárnico, que tiene la responsabilidad de continuar su producción para abastecer el suministro básico a la sociedad.
En Quality Temporal seguimos ofreciendo nuestros servicios para que nada se pare. En este periodo y quizá más que nunca, nos estamos relacionando con nuestros clientes como partners, ofreciendo nuestra ayuda y apoyo por encima de todo. Cada día ponemos foco en un seguimiento con ellos, y mantenemos conversaciones que dejan a un lado lo estrictamente profesional y entran más en lo personal. Una vez consolidada la recuperación, y cuando el optimismo económico lo permita, las empresas necesitarán completar sus estructuras con personal formado y preparado y, una vez más, las ETT tendrán un papel relevante.
Pienso que en esta pandemia todos hemos reflexionado sobre la situación que vivimos y hemos revalorizado nuestras prioridades. Sobre todo, después de haber superado ya todas las etapas de “bajón” definidas por el modelo Kübler-Ross, comúnmente conocido como las cinco etapas del duelo, que postula un proceso por el cual la gente lidia con la tragedia, especialmente cuando es diagnosticada con una enfermedad terminal o una pérdida catastrófica, negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Ahora ya nos encontramos en la etapa de aceptación, que nos permite encaminarnos hacia la recuperación sanitaria, social y económica.
Cada día, es un día menos, y seguimos a tu lado.